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Note de lecture El trabajo presentado por Daniel Zimmerman
que me ha sido enviado para su lectura se titula "CASTELVETRANO, UN OLVIDO
REVISITADO". Tal como el título indica, se trata de una serie de consideraciones
relativas al ejemplo que Freud introduce como agregado en 1911 a su "Psicopatologia
de la vida cotidiana" en el apartado "olvido de nombres y series de
palabras". Los primeros dos párrafos que ofician a modo de introducción,
donde no aparece ninguna hipótesis explícita, permite inferir el
propósito del autor, cito textua: "..el olvido del nombre Castelvetrano..........permite
verificar de manera privilegiada como el "metabolismo" del significante
constituye el resorte de las formaciones del inconciente". El recurso de
la metáfora en cuestión "metabolismo", indica el modo
de considerar por parte del autor el estatuto del significante. A renglón
seguido releva textualmente la razón que Freud nos da y que justifica la
presentación de este ejemplo de olvido. "Un complejo personal que
domina al sujeto en un momento determinado puede producir en dicho momento y en
cuestiones apartadas de su propia naturaleza, el olvido de un nombre".
En este punto me permito introducir el primer comentario, como aquello que podría
ser motivo de discusión particularmente en los ejemplos que puedan considerarse
"autobiográficos". 1) La necesidad de establecer una distinción
entre la persona de Freud, y Freud como el nombre de un discurso, dicho de otro
modo , discernir a Freud del sujeto al cual el complejo personal concierne. La
mención alude a una cierta esquizia entre las cuestines personales y la
naturaleza del sujeto en cuestión. Me refiero al sujeto del olvido, que
no se superpone con la persona de Freud, el sujeto que se corresponde al olvido
como función. 2) Cuales son los alcances de las consideraciones "autobiográficas"?
La primera parte del trabajo aparece precedida por un epígrafe que
autor denomina "LA TRAMA DEL COMPLEJO". En este apartado tampoco encontramos
una hipótesis explícita, se trata mas bien de consideraciones que
se apoyan en la secuencia de las permutaciones , fragmentos, anagramas y traducciones
a partir de los sustitutivos que aparecen en lugar del nombre olvidado. Según
el autor, de como se despliega la trama del complejo, destacando la dimensión
de creación que el trabajo del olvido produce. Encontramos allí
una articulación implícita entre los sustitutivos y el rebus, aquello
que entra dentro del alcance de la función de los sustituvos, y que llama
a la interpretación, da lugar por esa vía a la entrada del sujeto.
Se puede desprender como propósito del autor relevar la articulación
entre la determinación del complejo y el engendramiento de sentido, producido
en las secuencias que se pueden producir en la fragmentación y descomposición
del deletreo propio de los elementos significantes. Se pueden relevar en este
apartado como elementos a considerar: 1) La determinación del significante
y la función de los sustitutivos. 2) La instancia de la letra en el
inconciente. 3) Los alcances de la reciprocidad que aparece en los interlocutores
comprometidos en este ejemplo, que configuran el contexto planteado en términos
de la vejez - juventud. La segunda parte esta presentada bajo el título
"EL HORROR DE LA MUERTE". Comienza con el relevamiento de un comentario
de Freud que aparece en la presentación de este olvido y que el autor reproduce
fragmentariamente, cito textualmente el párrafo en cuestión: "-Seguramente
- dijo - el olvido se debe a que la parte final del nombre, o sea vetrano , me
recuerda la palabra veterano, pues sé que no me gusta pensar en la vejez
y reacciono con extraña intensidad cuando se me hace recordar". A
partir de allí, el propósito del autor es interrogar el enigma del
deseo de Freud. Se apoya en dos cartas que dirigidas por Freud a Jung y que aluden
al olvido en cuestión. En una de ellas hace alusión a la fuente
de este olvido volviendo a mencionar lo que llama su "complejo de vejez",
cuya base erótica ya le ha mencionado en otra oportunidad. En la otra
haciendo alusión a la oposición (Giovane - Veterano) , lo explica
apelando al mito del dios anciano que desea ser sacrificado para resucitar rejuvenecido
en el nuevo. El autor acertadamente no pretende decidir por ninguna de ambas
referencias, sino destacar como bajo el modo del sacrifricio cobra presencia la
muerte. Poniendo el acento en la parte fi nal del trabajo la preocupación
presente en varios puntos de su obra por parte de Freud por el futuro del psicoanálisis.
Cito textualmente el párrafo final: "En su anhelo de resurrección
Freud desconoce precisamente que , como cualquier otro, él vive de ser
mortal". Es interesante destacar que el autor no dice "como cualquier
otro", sino que como cualquier otro , es allí en ese que el lugar
de excepción atribuido a la persona de Freud, dado que al nivel de la persona
de Freud nadie podría suponer lo contrario, otra cuestión es lo
que concierne al discurso , lo que podemos considerar al nivel de la causa del
olvido, precisamente lo que concierne al deseo de Freud, o mejor dic ho, lo que
el nombre Freud implica como deseo, ni mas ni menos que el psicoanálisis
mismo. lecture de GABRIEL LEVY | |