|
Note de lecture Este trabajo tiene, a mi entender, una
característica, que es la de presentar de un modo sumamente condensado,
una multiplicidad de ideas de cierta complejidad. Por este motivo me será
inevitable recurrir a la transcripción de algunos de sus párrafos
centrales, e intentar de este modo decir, sobre aquello que me interroga. La
idea de pensar al inconsciente sin deslizarse hacia una concepción de capas
y profundidades, lleva a la autora a destacar la preocupación lacaniana
por las superficies topológicas. Esto le permite, retomar la idea de inconsciente
como superficie. Para que haya efecto de escritura, es necesario que el inconsciente
hable, que ex -sista como discurso, siendo el discurso del analista el que lo
hace ex -sistir. Toma así relevancia la operatoria de la negación,
como medio donde el inconsciente, se articula como discurso. Este es un tema sobre
el que Marta Nardi hace un minucioso recorrido a lo largo del trabajo: la negación
desde la lógica proposicional, la conjuntística, la lógica
modal y la topología. Su intención es la de establecer una relación
entre la operación lógica y la topológica, que la lleva a
recorrer algunos textos. Parte de una frase de Radiofonía: El inconsciente,
para el sujeto es lo que reúne en él las condiciones o él
no es o él no piensa. Para considerar esta reunión, recurre al Seminario
La lógica del fantasma, donde Lacan trabaja el cogito cartesiano, basándose
en la lógica proposicional y conjuntística: "En lugar del cogito
ergo sum, tenemos dos conjuntos " o no pienso o no soy", que previo
vaciamiento del ergo, vaciamiento de la intersección, quedan como conjuntos
disyuntos". Es por esta lógica que al inconsciente no le está
permitido articular: "entonces soy". El sujeto al hablar, lo hará
bajo el signo de la negación "no soy yo quien lo dice", o bajo
la forma de la mentira. La autora se pregunta, entonces, cuál es la
lógica que rige los dichos -de mentira y negación- en un análisis.
"El analizante dirá: "Ud. piensa, yo no pienso, y mientras supongo
que es ud. el que piensa -momento considerado como necesario en todo análisis-
me refugio en el "no soy yo quien lo dice"". Términos éstos
de una elección forzada, que aunque juntos, se presentan sin conectividad
lógica posible, en los que Freud ubica -de acuerdo a la autora- la imposibilidad
de una intervención analítica que dé lugar a un decir que
toque lo real. Entender la doble negación como afirmación, desde
la lógica proposicional -señala- lograría sólo una
aceptación intelectual. Y aquí, su pregunta central: "¿Qué
recurso podemos implementar para dar cuenta de la articulación del "no
pienso o no soy" en el acto de hablar, ya que la lógica simbólica
se presenta como insuficiente?" (Entiendo que al hablar de la insuficiencia
de la lógica simbólica, se está refiriendo a la lógica
proposicional). Como respuesta propone tomar la Banda de Moebius, que Lacan emplea
para resolver el problema de la doble inscripción en Freud y que permite
ubicar el pasaje del "no pienso" al "no soy". Este pasaje
se produce de manera continua y -agrega- "salvo que haya acto analítico
la elección no es hecha y en tanto no hecha no hay alienación, es
decir que mantenemos la ilusión de que podemos hablar rechazando el rasgo".
Aquí se me plantea como pregunta: si no hay elección como efecto
del acto analítico, ¿implica que no haya alienación? La ilusión
de que podamos hablar rechazando el rasgo, sería en todo caso, una ilusión
de no alienación. Para ampliar esta idea, M. N., propone lo siguiente: "Es
como si el paciente hubiera dicho en realidad: con respecto a esa persona se me
ocurrió, es cierto, que era mi madre; pero no tengo ninguna gana de considerar
esa ocurrencia. Pero no fue esto lo que dijo, porque si dice esto podemos considerar
que esta frase es el efecto de un corte, de una interrupción" Al
analizante, en uno de esos pasajes por el "no pienso", algo se le puede
ocurrir contingentemente. Y aquí, Marta Nardi, establece un lazo con el
ne expletif, que en "...ou Pire", es considerado como la negación
correspondiente al pas-tout, la contingencia. "El inconsciente se hace
discurso por esta negación, agrega la autora, y el sujeto queda dividido
por lo que dice y el rechazo a lo que dice". -Se me plantea aquí,
como cuestión a ser ampliada, las conexiones entre el ne expletif y la
verneinung-. En el momento en que se deshace la estructura moebiana, el inconsciente
se muestra como el corte mismo. Queda una banda cilíndrica, como efecto
de este corte, provista de un derecho y un revés, siendo el discurso del
analista el envés del discurso del inconsciente. Marta Nardi concluye
el trabajo con la propuesta de que consideremos una hipótesis: el corte
en la banda de moebius, es el equivalente del no-todo en lógica modal.
lecture de ELSA VILLAGRA | |