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EL AMOR ES UN SENTIMIENTO CÓMICO
de RAUBIAN Monica Vigo
El amor es el primer vínculo que el sujeto mantiene con el Otro:
demanda amor. Se crea el "error" que se ha encontrado el objeto
que falta, objeto de su deseo. Desvío que se paga caro.
Resultará: un ignorante, un necio, un canalla, o ... un cómico.
Pero para aquél que intente no ceder en su deseo, tendrá
que tener las cuentas claras y avanzar. Deberá pagar ese precio
nada barato (renuncia al goce), pero imprescindible si se trata de tomar
"posesión" sobre él.
El deseo enigmático, huidizo, puede presentarse bajo las mascaradas
del amor. EL AMOR ES EN SÍ UN GOCE. ¿Una solución?
Su propuesta consistiría en tener a un otro todo para sí.
Lacan dice que lo que caracteriza a una dimensión como propiamente
cómica es la presencia de lo que se podría llamar "el
NEGOCIADO" ¿CUÁL ES EL VALOR DE UN SUJETO COMO OBJETO?
Que el sujeto sea el objeto de una NEGOCIACIÓN es su
DIMENSIÓN CÓMICA.Y, esto no es "raro". "Siempre
se trata de INTERCAMBIO de
soportes sociales" ( sujetos)...Si "la verdad del sujeto...(
que no está en él ,... sino en un objeto de naturaleza velada)...
hace surgir ese objeto; ese objeto es... ¡LO CÓMICO PURO!
Estrategias desopilantes, modos locos, el amor se presenta como un sentimiento
verdaderamente cómico. LACAN recomienda: "si quieren saber
de amor ... LEAN
COMEDIAS".
Aristófanes, el poeta cómico por excelencia, que sostiene
un lenguaje no
superado por ninguno, cuenta el mito del amor: "era un hombre doble,
frescamente
separado por el hilo de los dioses de su propia mitad. Pero a falta de
estar suficientemente
cercenado, no sabe qué hacer con esa mitad de la que no puede desprenderse,
y muere de
inanición para no dejarla al borde del zarzal primitivo donde ocurre
la escena. Lacan,
desafía el mito, y enseña que lo que se perdió, y
se busca, no es al otro, complemento sexual, sino esa parte de sí
mismo perdida para siempre... la inmortalidad
Hablar de amor no es asunto de sexo. El cuerpo es el "escenario
de una poética que el discurso freudiano ha introducido al crear
al sujeto del inconsciente, capturado por su deseo (sólo articulado
por la presencia del significante, que ha dejado sus marcas en el cuerpo
y ha establecido para cada quien cuáles son sus CONDICIONES DE
AMOR).
Cuerpo significante, aprehensible en el inconsciente, que lo convierte
en el testimonio de un saber que escapa en gran parte al ser que habla.
Pero que soporta un desciframiento, al que se le supone una habilidad,
un "savoir-faire" atrapable en sus formaciones: los olvidos,
retruécanos, el chiste ... ( no es lo mismo que la comedia, pero
está muy próximo): "la futilidad, la inanidad, la poca
importancia de la frase ingeniosa que toma valor a partir de La Técnica
freudiana, le ha permitido a su creador mostrar que su propia alegría
reside en la dominancia del significante sobre las significaciones más
pesadas de llevar de nuestro destino".
La comedia nos trae esa dimensión verdaderamente humana "de
ser pobres sujetos del discurso. Cuando el héroe cómico
tropieza, se ve en apuros, se dice: el pequeño buen hombre sigue
viviendo". Nunca dispuesto a pagar el precio por sostener su deseo.
Este es el verdadero
drama humano. No la tragedia, sino la comedia .
El hombre tiene ojos pero para no ver. No es necesario que se los arranquen
como en las
tragedias griegas. En las comedias no hay angustia. El amor que es narcisista,
nunca saca a nadie de sí mismo. Se ama según la imagen que
ofrece el propio fantasma, según sus
vestiduras. Es la ceguera propia de lo humano. El amor es una pasión
y como tal supone la
ignorancia del deseo y convierte a quien la sufre totalmente dependiente
de ella. Esa ceguera
lo lleva a que no vea más allá de la punta de su propia
nariz. Y ahí su desdicha, ya que es allí
donde comienza su mundo y no puede aprehender en él su deseo, sino
gracias al mismo
expediente que le permite ver su nariz misma... en algún espejo.
Pero apenas ha discernido su nariz, se enamora de ella, y ésta
es la primera significación por la cual el narcisismo
envuelve el deseo. Y lo realmente cómico es que, con tal de alcanzar
la satisfacción, cualquier
cosa es válida.
El amor es engaño, pero se cree en él, como se puede creer,
peligrosamente, en la mujer.
El amor y las mujeres son cuestiones clave en las comedias de Molière,
ese maestro único, que vivió en el particular siglo XVII.
Él se encargó de inmortalizar a esas mujeres apasionadas
por el saber, seducidas por el poder creador de la palabra. En sus obras
(LAS PRECIOSAS RIDICULAS, LAS MUJERES SABIAS, LA ESCUELA DE LAS MUJERES)
nos toparemos con "LA IDIOTA", la que enfrenta con la incómoda
pregunta acerca del precio sin precio que hay que pagar por sostener la
estupidez, la ignorancia; y con las "preciosas", que se habían
puesto ese nombre por haber dado "precio" a eso que no tenía
ninguno y, como se ironizaba en la época, aún a ellas mismas...
En esa centuria plagada de progresos, con una Iglesia en decadencia pero
aún con poder, nace el Movimiento de las Preciosas, con Madame
de Scudéry como una de sus fundadoras.
Mujeres que se convirtieron en anfitrionas de los "salones"
(que a partir de 1642 se multiplicaron en Francia), donde se comentaba
y protegía a los autores revolucionarios. Llegó a desplazarse
el latín como idioma "culto" y las traducciones se hicieron
imprescindibles. Ellas querían saber.
Empezaban a convivir y compartir con los hombres en materia de cultura.
Se convirtieron en verdaderas artistas en lo que hace a creaciones de
sentido en el discurso común (me falta la palabra, giro hoy habitual,
"fue una agudeza que creó esa amable sociedad consagrada al
perfeccionamiento del lenguaje").
El lenguaje juega siempre con la ambigüedad, y la mayor parte del
tiempo uno no sabe qué dice. Siempre se le adjudica al otro la
impresión que está realmente ahí, es decir que es
capaz de dar la respuesta esperada. Efectivamente la mayor parte de los
discursos sostenidos, son completamente ficticios.
En ese momento histórico el amor era la formación por excelencia
(como fechable es en la vida de un sujeto, cuando el acontecimiento del
encuentro se produce). La mujer se había
convertido en un instrumento de conquista y no de placer. Debían
respetarse las exigencias de una organización extremadamente refinada
y compleja, imaginadas por Madame de Scudéry (LA CARTE DU TENDRE).
Estas cuestiones del amor enloquecían a estas mujeres. Ellas no
tenían duda que el amor es un decir. Elevaron a un primer plano
el arte de la conversación, o mejor dicho, hicieron de la conversación
un arte.
Cuestiones de amor, impasses del deseo .... Quizás EL AVARO, célebre
personaje popularizado por Molière, es el héroe cómico
por excelencia (dimensión de sujeto que interesa al psicoanálisis).
Él cree en el amor "como una capitalización protegida"
¿cómo se asegura del valor de su objeto? Se convierte en
cómico cuando el galán le habla de su hija y oye de su tesoro,
convertido en el objeto de deseo (del otro).
Éste deviene la marca de un interés privilegiado, "su
agalma... pero al mismo tiempo es lo que produce su hundimiento. Porque
mientras está encerrado en el cofre está fuera del circuito
de la vida, sustraído a ella. ÉL NO POSEE EL COFRE, ESTÁ
POSEÍDO POR ÉL. Es una riqueza muerta." ÉL QUEDA
FUERA DE TODO RIESGO. Pero lo que él no sabe es que al no entrar
en el juego y pagar por la apuesta que el deseo propone, cultiva el rito
funerario del amor, pero como tal es HOMBRE MUERTO.
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